Quizás en la noticia tecnológica más inesperada del año, el multimillonario y evangelizador de la IA, Sam Altman, fue cesado de su puesto de director ejecutivo en OpenAI por la junta directiva de la compañía después de un aparente voto de censura. Su redacción exacta en el comunicado: La «partida de Altman sigue a un proceso de revisión deliberativo por parte de la junta, que concluyó que no fue consistentemente sincero en sus comunicaciones con la junta, lo que obstaculizó su capacidad para ejercer sus responsabilidades».
¿Qué está pasando en la empresa más publicitada del mundo? Aquí están algunas teorías totalmente especulativas en las que podemos pensar además de otras que circulan por la red.
1. ¿Altman eludió a la junta directiva en un acuerdo importante?
Según el lenguaje de la junta y la forma en que funcionan estas gigantescas empresas tecnológicas, esta es la teoría predominante que circula en este momento. “No siempre es sincero” es una forma muy diplomática de decir que Altman mintió.
Es posible que Altman (y potencialmente el presidente de OpenAI, Greg Brockman, quién se anunció como presidente simultáneamente por la Junta y luego él renunció) quisieran hacer un movimiento audaz que sabía que a la junta no le gustaría. No es raro que estos acuerdos se celebren silenciosamente en salas llenas de humo (o vapeo) y luego se presenten como una hecho consumado pero si fue lo suficientemente controvertido y la junta se enteró de estas maniobras, podría ser el combustible para una destitución.
Pero, ¿qué tipo de acuerdo sería lo suficientemente grande y peligroso como para despedir sumariamente al director general y a la cara más famosa de la empresa? Estuvo en el escenario hace dos semanas en la reunón de desarrolladores ¿Qué pudo haber pasado desde entonces?
Pocos se sorprenderían si Microsoft, que está profundamente arraigado en OpenAI como inversor y cliente, fuera un factor añadido en este punto. ¿Podría Altman haber estado trabajando con (o contra) el patrocinador de OpenAI en secreto? Si Altman quisiera matar la gallina de los huevos de oro al volverse independiente, eso podría haber activado el deber fiduciario o legal de la junta. Por otro lado, si estuviera negociando algún otro acuerdo, como una adquisición o una integración más profunda y exclusiva, también podría haber provocado que la junta directiva se molestase, ya sea por la idea en sí o por haber sido excluido.
Pero si Microsoft estaba tan sorprendido como el resto de nosotros, como dice en una noticia de Axios , difícilmente podría ser el tipo de conspiración de alto riesgo que algunos parecen estar esperando. Pero hay que suponer que Microsoft diría eso de cualquier modo. Incluso si hubieran estado trabajando con Altman en algún tipo de plan secreto, pueden decir sinceramente que les sorprendió su despido y ellos “seguir comprometidos con la asociación».
2. ¿En desacuerdo sobre la estrategia a largo plazo?
A pesar de ser la empresa de tecnología más popular del mundo en este momento y de que todo el mundo habla de ChatGPT, OpenAI no es exactamente un negocio sólido. Está quemando dinero en la caldera más rápido de lo que puede generarlo, según todos los indicios, un producto increíblemente caro a precios de ganga.
Eso está muy bien durante uno o dos años, pero en algún momento esa estrategia cambia de un truco de crecimiento a un pasivo existencial. ¿Podrían Altman y la junta haber tenido diferencias irreconciliables sobre dónde radica ese punto?
Esto no parece tan probable. La empresa lo ha perseguido de forma muy deliberada, públicamente, con confianza y a largo plazo. Altman y la junta parecen estar sincronizados en esto, al menos por el momento.
3. ¿No cuadran los números?
Por otro lado, ¿podría OpenAI estar perdiendo incluso más dinero del que Altman admitió o proyectó? Parece imposible, pero los costes de llevar a cabo esta operación no tienen precedentes, ni tampoco la operación en sí.
¿O qué pasa si, y nuevamente esto es pura especulación, Altman ha estado llevando a cabo en secreto un proyecto interno, tal vez con un coste significativo, en contra del consejo de la junta y sin las medidas de seguridad necesarias que probablemente deberían acompañar dicha investigación? Suena un poco descabellado, pero despedir a su director ejecutivo de esta manera también lo es. Cabe recordar el último ataque DDoS.
Algún tipo de desajuste importante en el departamento financiero podría ser motivo de despido, pero es difícil imaginar qué podría haber ocultado Altman a la junta directiva y al CTO eso sería tan condenatorio.
También existe la posibilidad de que Altman estuviera haciendo inversiones personales de una manera con la que la junta no estaba de acuerdo. Con OpenAI preparado para ser un hacedor de reyes en este campo, sin duda estaría en una posición de poder. Uno podría pensar que, como una persona impulsada ideológicamente ya increíblemente rica y al frente de la empresa de inteligencia artificial líder en el mundo, Altman habría superado la necesidad de hacer este tipo de trato paralelo, o al menos un escrutinio sobre él y sus cercanos a él lo impediría. Pero nunca se puede estar seguro.
4. ¿Un incidente importante de seguridad o privacidad?
La idea de que la empresa ha experimentado un problema de seguridad importante, quizás generalizado, se ve reforzada por el hecho de que, según se informa, Microsoft suspendió el uso de ChatGPT internamente hace unos días. Posteriormente, OpenAI dejó de admitir nuevos registros. Si hubiera un problema de seguridad grave en su producto más importante y Altman le restara importancia, eso obviamente crearía desconfianza en la junta directiva.
También existe la posibilidad de un uso indebido a escala con la enorme cantidad de datos personales que viajan a través de las API y los servicios de OpenAI.
En contra de esta teoría está el hecho de que la CTO Mira Murati acaba de ser ascendida a directora ejecutiva interina en lugar de Altman. Parece poco probable que algo relacionado con la seguridad pase por el CEO y no por el CTO, o que los dos estén en desacuerdo hasta el punto de que uno podría ser despedido de esta manera y el otro intercambiado para limpiar el desastre. Como señala el comunicado de la junta, Murati está a cargo del producto y la seguridad, entre otras cosas. Cualquier problema significativo en ese departamento se reflejaría tanto en ella como en Altman.
5. ¿Diferenciaa entre la ética o la filosofía de la IA?
Altman es un orgulloso tecno-optimista y a menudo habla con cariño de las posibilidades de AGI, o inteligencia artificial general, un sistema de software teórico que logra un intelecto y una versatilidad similares a los humanos.
La declaración de la junta incluye claramente que “OpenAI fue estructurado deliberadamente para avanzar en nuestra misión: garantizar que la inteligencia artificial general beneficie a toda la humanidad” y que era necesario un nuevo liderazgo. Es posible que el entusiasmo de Sam por AGI, incluso en ausencia de un proyecto o acuerdo secreto, haya provocado una ruptura importante entre él y la junta.
Ha sido obvio para todos que Altman llevó a la empresa en una dirección mucho más corporativa desde sus orígenes, cambiando su estatus legal y buscando agresivamente aplicaciones empresariales y de consumo. Eso no se parece mucho a la “misión” que la junta quiere promover. Por otra parte, este cambio no es de ahora, y ciertamente no parece una razón plausible para despedir abruptamente al CEO y a algunos otros.
6. ¿Qué pasa con la propiedad intelectual y la responsabilidad legal?
Altman dijo en el Dev Day a principios de Noviembre que la compañía no quiere incurrir en ningún problema de derechos de autor al usar (como se le había preguntado) conjuntos de datos de libros pirateados. Pero muchas investigaciones que se pueden consultar contradicen eso, al igual que casi todos los científicos de datos de IA con los que se habla. Es extremadamente difícil imaginar que OpenAI haya construido GPT-3 con la base de datos de libros con derechos de autor (como parece ser el caso) pero no GPT-4 o modelos posteriores.
Si usted fuera la junta directiva y se enfrentara a las crecientes acusaciones de que su producto se creó a partir de un conjunto de datos que incluye miles o millones de obras protegidas por derechos de autor, y su director ejecutivo hubiera minimizado sistemáticamente la posible responsabilidad allí, ¿cómo se sentiría? Es posible que profundamente herido.
Pero, de nuevo, si la razón fuera la responsabilidad por derechos de autor, parece poco probable que la junta promueva la CTO. Presumiblemente, el director científico de OpenAI, Ilya Sutskever, también estaría al tanto y todavía está en la junta directiva.
7. ¿La CTO Mira Murati lanzó un golpe de estado?
Probablemente no, parece genial y, de todos modos, ¿qué CTO quiere ser director ejecutivo?
8. ¿Un “asunto personal”?
Cuando alguien es expulsado a toda prisa, no es raro que haya algún tipo de comportamiento poco profesional en el lugar de trabajo. Algunos directores ejecutivos pasan por alto cosas como tener hijos con subordinados directos, pero no todos.
Altman también tiene tres hermanos y su hermana menor, Annie, lo ha acusado públicamente de abuso. No tenemos forma de evaluar estas acusaciones, que involucran asuntos privados.
Sin embargo, la interpretación del lenguaje de la junta al despedir a Altman es que no fue un problema legal o personal lo que provocó la acción, sino uno profesional o comercial.
Probablemente no se sepa toda la verdad durante mucho tiempo, ya que los personajes del drama tengan un acuerdo de confidencialidad. Según varios rumores y filtraciones, una reunión general sobre la situación no produjo ninguna revelación más allá de garantías banales de que la empresa está bien y que pronto tendrán un nuevo director ejecutivo. Es normal escuchar muchos rumores antes de saber la realidad.
